martes, 30 de agosto de 2011

Mucho

Muchas cosas para escribir, muchas preguntas por responder, muchos libros por leer, muchas películas para ver, mucha música para escuchar, mucha gente por conocer, muchas ideas para escribir, muchos dibujos por hacer, mucha música por componer, mucha comida por comer, muchas tazas de café por tomar. Muchos caminos por conocer, muchos lugares por explorar, muchas ciudades por conocer, muchas biromes por perder, mucha ropa para ordenar, mucho por aprender, mucho por dejar, mucho por crecer. Mucho tiempo no aprovechado, muchas cosas por hacer.


Aaaaaaaaaaaah me estoy volviendo locaaaaaaaa.




lunes, 29 de agosto de 2011

Melodías diarias

y sigue la película
del café frío y las dudas
de romances en la luna
y las preguntas sin contestar

de las risas de los jueves
de las lágrimas escondidas
de un pañuelo y una herida
del tacto y el placer

a la tierra hay que bajar
me dice siempre una amiga
y yo le digo que mi vida
no es fácil de pronosticar

me doy vuelta y camino
voy dejando mis huellas,
doy un beso a mis espaldas
y me voy de la ciudad

viernes, 19 de agosto de 2011

No juzges sin conocer

Me pasó lo siguiente el otro día en el 60:

Serían las nueve de la noche, estaba sentada en el asiento que da a la ventana, el otro, el que da al pasillo, estaba desocupado. Viajaba para capital con una torta en mis manos. (Como agradecí por haber encontrado un asiento libre cuando me subí al bondi, ya me imaginaba viajando parada con la torta, haciéndoles caritas a los pasajeros sentados para que me cedieran el lugar) Me enchufo el mp3 y pienso en nada.
En Unicenter, como de costumbre, frena y se suben varias personas, entre ellas una persona de unos treintilargos años, rubia, mirada cálida y menuda, con muchas bolsas de compras. Se sienta al lado mío, y sigo pensando en lo que estaba escuchando, en que estaba llegando tarde a la reunión de amigos, en que ojalá el bondi pare poco y llegue rápido a mi destino. En el recorrido codeo a esta chica varias veces sin querer. Con la torta y el movimiento del bondi a veces es inevitable, le pido disculpas. Me dice algo como "no te hagas drama, si yo llevara, me imagino que es una torta lo que llevás ahí, trataría de cuidar que no se me caiga y me sería inevitable no codear a la persona de al lado" Simpática la actitud. No pensé que algo tan tonto iba a desembocar en una "charla de bondi".

Nos ponemos a hablar. A todo esto, bajo el volumen del mp3, como para que quedara música de fondo. Me cuenta a qué se dedica, me comenta porqué prefiere ir a Unicenter antes que ir al resto de los Shoppings.. Me cuenta que estuvo laburando un tiempo en el Alto Palermo, después en la zona de Retiro, y ahora labura cerca de su departamento, nuevamente en Palermo. Que le gusta venir cada tanto a Martínez a aprovechar un poco de su tiempo libre.
Una chica con mucha cancha, muchas experiencias vividas, adaptada a las reglas de este mundo, contenta y segura. Una mina con todas las letras.
Su vida, ahora la mía. Le comento un poco a lo que me dedico, mis sueños, a ese trabajo que tanto odié en Unicenter, de las dudas sobre mi vocación, mis inseguridades, las pocas ganas que tengo de reincorporarme al mundo laboral.
Su respuesta, sus consejos. Si hubiese sido una licenciada en Recursos Humanos, que estaba buscando aspirantes a un puesto, por todo que le estaba contando no me hubiese contratado. Era el ejemplo de las cosas que no tenía que decir en una entrevista. En cambio si hubiese evaluado sólo mi simpatía y mis habilidades no dudo que no me hubiese contratado. Me sigue diciendo las cosas que ahora están preguntando en las entrevistas, la importancia de tener un hobbie, la necesidad de tener un trabajo. "Mas allá de estar en contra del capitalismo, tener un laburo es importante" me dice.
También me cuenta que va a visitar a su abuela que está enferma. Me recomienda donde bajarme para hacer combinación con el otro bondi que tengo que tomarme después. Un amor.
Despedida. Me dice su nombre, nos saludamos.

Una mina amorosa, abierta, dispuesta a ayudar a resolver mis inquietudes. Y eso que yo era una extraña para ella, me hablaba como ''uuuh yo pasé por esto, te recomiendo que hagas esto, eso y lo otro''.

Pensar que cuando vi a esta chica nunca pensé que llevara adentro tantas buenas cosas para compartir y me di cuenta que la apariencia es nada mas que eso, si hubiese seguido con esa postura, me hubiese perdido el gusto de haber conocido a una persona que me dio mucho sin pedir nada a cambio.

Algo de mí hizo click. Y empecé a caer en la cuenta de que está llegando el momento de volver a las pistas laborales.

jueves, 11 de agosto de 2011

El mundo sin esa repetitiva marca roja

Me pregunto que sería del mundo
si la Coca Cola dejara de existir.
Seríamos mas honestos en nuestras elecciones,
buscaríamos nuestra marca inmaterial de ideal.

Las navidades se celebrarían con vasos vacíos,
pero con profundos corazones burbujeantes de deseos.
Dejaríamos de ver infinitas publicidades,
y empezaríamos a recordar aquellos valores perdidos.

Tomar agua se pondría de moda,
viviríamos mas livianos,
alimentándonos por lo sano,
dejaríamos de ser esclavos del azúcar, del capital.

Las clases sociales perderían su identidad,
no mas Coca Cola Light, para la alta suciedad.
no mas fútbol 5 por la botella,
Adios domingo familiar.

El Fernet se serviría en un shot,
Cuba sería mas libre aún
Cerveza y Gancia
América cultural Tequila, Whisky, Pisco, Mojito.

Rebeldía hacia un ejemplo impuesto,
el dulce, mi vida, está en tu interior.
La falacia se encuentra afuera,
un vaso de Coca no te llena la sed.

Es espejo del deseo,
un buen libro te hace crecer.
Una gota representa,
muchos intereses de lo que jamas llegarás a entender.

Cosas que no suceden todos los días

No hay nada mas lindo que encontrar algo que no estaba buscando.

Ayer encontré plata, fue una sensación tan linda. La vida de desempleada es así, te ajustás a lo chico, lo que antes darse un gustito era ir a tomarme un café, o tener ganas de comprarme una remera que me había gustado. Hoy es disfrutar una linda cena en familia o hasta despertarme con el sol en la mañana. Suena re poético, pero es algo que me pasó hoy, no necesité usar el despertador siquiera. Mi cuerpo se acostumbró al horario en que me levanto todos los días, y cuando abrí los ojos, sonreí.

Despertarme sonriendo, que lindo!

Cosas tan simples que merecen ser dichas


Noticia de último momento



Ayer cuando terminé la sesión con el psicólogo me dijo: ''El próximo miércoles al diván''. Es como que venga mi vieja al cuarto y me diga ''Tere te compré un chocolate''. Sensaciones lindas si las hay.

Y ahora vengo con las conclusiones, empiezo a ponerme reflexiva y digo... Click. Después de pasar laaaargo tiempo sentada en la silla frente a mi analista, sumergida en un mar de largos pensamientos, sumándoles olas, mareas altas, mareas bajas, y diría que hasta tsunamis de emociones. Paso a otro lugar, al diván. Es como un ''Noooo puedo creerlo, finalmente creo que estoy haciendo las cosas bien'' A la vez me da miedito empezar la parte final de mi tratamiento, no es que padezca algún problema locuroso. Aunque creo que en parte, tanta locura de la ciudad, nos hace un poco locos. ¿No? Necesitamos desintoxicarnos de tanta basura verbal, alimenticia, humana.

Mi infancia y principios de la adolescencia me la pasé de psicóloga en psicóloga y nunca llegué a sentirme de esta manera. Por alguna forma no me hacía efecto. Finalmente las cosas de mi vida empiezan a tomar su curso, son menos conclusiones, mas cosas para escribir, menos para pensar, me siento mas liviana. A lo lejos puedo empezar a distinguir a que cosas darle peso y a que cosas no.

Como te odio paciencia! La realidad es que todo lleva su tiempo, entré al consultorio pensando que iba a salir a los 3 meses y no fue así. Empecé canto pensando que al mes iba a sacar una buena voz y no fue así. Todo requiere un mínimo de esfuerzo, y gracias a ese esfuerzo que pagué. Hoy puedo decir que me estoy sientiendo mejor.

miércoles, 3 de agosto de 2011

Rompi el chanchito, hola Drexler

Rompí el chanchito, me compré la entrada para ir a ver a Drexler. Ya fue, vendrán tiempos mejores, ayudaré a mi viejo con su laburo para hacerme unos pesos, encontraré una forma de juntar money de nuevo.

Me agarra ese nose qué cuando gasto de una plata, mas que nada una entrada porque no es como cuando te comprás ropa ponele.

Fuiste a comprarte un par de jeans, te gustaron y listo ¿200 pesos? Pingui! Te los llevaste y al día siguiente los estrenaste y después los tuviste para usar todas las veces que quieras.


Con la entrada es otra cosa, estuviste contando los días para que salieran a la venta, la compraste, la tuviste 3 meses mirándola con una ansiedad terrible y finalmente llega el día del recital...El momento en el que caes en la cuenta que lo que compraste no era un papelito cualquiera, sino un abrir de puertas a esa banda que tanto querías ir a ver. Y todo ese disfrute de ''Qué bien que me queda este jean, es re cómodo, lo voy a usar para el cumple de pepito, etc.'' terminan siendo ''Que emociooon, no lo puedo creeer, muchos gritos (porque eso ya ni es cantar) movimiento de manos, y le sumamos un poco de euforia'' Euforia que viene con fecha de vencimiento. Te dura mmm, 2 horas con la mejor de las suerte si la banda es copada. Sino conformate con 1 hora y agradece.
Peor si estás corta de guita (no quiero mandarme al frente, pero creo que ya lo hice) a todo esto le tenés que sumar el esfuerzo de ojos que te comiste por reconocer nítidamente al cantante de tu banda. Acertaste! Compré en pullman.

Mal que mal, no deja de ser un recital, y ahora viene la conclusión.

Eso sí, la parte post recital: salir del estadio/teatro/sala con la sensación de haber presenciado el concierto de ese artista que tanto te gusta, dio. No se compara con nada. Debe durar mas que la sastifacción de haberte comprado ropa, o en mi ejemplo, un jean.

Ahora me tocan los meses de espera, 2 meses a pura ansiedad viendo el papelito. Buuuu! No veo la hora que llegue Octubre...